¿Ésta fue una entrevista o una clase, Cymer?

Hace unos días entrevistamos a Paul, un fotógrafo filipino que vive en Manila, la capital del país. Jamás imaginamos que iba a ser tal experiencia... Disfruta la entrevista y las fotos de Cymer. Querrás una cámara nueva.


La entrevista

Hola, Paul, ¿cómo estás? No estoy muy seguro de que todos los lectores de Heptagrama te conozcan, así que por qué no comenzamos la entrevista pidiéndote que te presentes?

OK, mi nombre es Paul Rocymer Bucao, pero puedes llamarme Paul or Cymer. La mayoría me llama Paul, mas Cymer es mi mote en casa. Y estoy tratando de hacer que más gente me llame por mi apodo —¡es por eso que uso el nick en mis fotos, pero creo que no está funcionando! (sonríe)

Soy de Manila. Nací y crecí aquí. Tengo 26 y soy consultor en TI de profesión. En la familia somos seis: 2 hermanos y 3 hermanas. Yo soy el menor. Tengo, además, 13 sobrinos y sobrinas en total. ¡Una familia grande significa muchos niños para fotografiar! Aunque algunos de ellos ya no son niños, en realidad.

Bien, Cymer, gusto conocerte. Dime, ¿cuánto tiempo llevas en la fotografía hasta ahora?

Comencé a tomarlo realmente en serio más o menos en febrero del año pasado (2006).

¿Y por qué decidiste volverte uno? ¿Cómo comenzó?

Tal vez haya sido por mi mamá. Mamá adora las fotos. Los seis en la familia solíamos tener fotos de todas y cada una de las ocasiones especiales; y, desde luego, de las no tan especiales, como cuando mamá nos vestía a todos con ropa del mismo color. ¡Gracias a Dios yo no estaba ahí! No había nacido cuando ella hacía eso! De todos modos, siempre ha habido una cámara en casa. Mis dos hermanos también se compraron cámaras reflex hace unos 10 años, creo. Y creo que también querían entrar a la fotografía en algún punto, pero que realmente no lo hicieron. Aún así diría que el interés nació en la familia y que simplemente lo dejé crecer.

Mi primera cámara fue una Canon Powershot S50, más o menos en mediados del 2003, pero ni usaba sus controles manuales —¡ni siquiera los entendía entonces! Pero esa cámara me llevó a través de muchos momentos en mi vida hasta que finalmente la reemplacé a finales del 2005 y compré una Powershot S2. Fue durante los World Pyro Olympics (un espectáculo de fuegos artificiales) en Manila a finales del 2005 cuando finalmente intenté usar los controles manuales. Y eso me dio una de las mejores fotografías de atardecer que haya logrado hasta ahora. Es bastante irónico que mi mejor fotografía de fuegos artificiales fuera de un atardecer y no de los fuegos artificiales, pero realmente me encantó esa foto. Y podría decir que esa foto fue un hito importante en mi fotografía.

Luego, en febrero del año pasado, estaba atravesando algo realmente dramático en mi vida y necesitaba una distracción —un escape o algo así—, así que decidí tomarme la fotografía realmente en serio. Tomé un taller de Fotografía Básica de 4 días con algunos amigos de la oficina y de ahí he intentado mejorar por mí mismo. Así que creo que, si bien comenzó como una mera distracción, ahora es una verdadera pasíon.

¡Vaya que es una historia! Y debo agregar que tienes un trabajo estupendo, Cymer, por lo que me alegra saber que sigues mejorando. El pequeño insecto, por ejemplo, es una gran foto. ¿Qué tan difícil es fotografiar a la naturaleza? Tengo curiosidad. Imagino que en ocasiones necesitas esperar mucho para obtener la foto exacta.

Es realmente difícil y la mayoría de las veces, frustrante. Primero que nada, no es que puedas hacer que tu objetivo pose o decirle qué hacer. A manera de ejemplo, tuve mucha suerte para fotografiar a ese escarabajo con manchas porque en realidad lo que intentaba capturar era una libélula entonces. También tomé una, pero a pesar de estar rodeado de verde y cientos de libélulas, la única oportunidad real que tuve de fotografiar una fue cuando se posó en el concreto. Definitivamente, no es la mejor manera de fotografiar una libélula, pero tuve que arreglármelas con eso.

Y sí, tienes que ser muy paciente. Y no lo puedes planear muy bien porque no estás en control de lo que está pasando. Volviendo al escarabajo moteado, en realidad lo tomé después de cansarme de esperar a que una libélula se posara en una hoja. Así que, aparte de tener suerte y ser paciente, también necesitas tener un ojo abierto a los detalles.

¿Y qué me puedes decir de esta fotografía morada? Con honestidad, no pude descifrar lo que era.

Ésa en realidad es una foto de tres vasos de vino de diferentes formas y tamaños alineados. Fue uno de los trabajos finales del taller de fotografía básica que te mencioné hace un rato. ¡No vas a creer lo simple que preparar esa foto realmente fue! La tomé en la cocina... La gota de atrás es simplemente una hoja de papel blanco, los las copas están sobre una mesa plegable y la luz era un acuario azulado cubierto con celofán rojo. Así fue como obtuve el morado, pero no fue intencional, en serio. ¡Soy bastante ciego para los colores y en realidad pensé que era un rosado! ¡ja, ja, ja!

¿En serio?

Sí, de todos modos, una de las tomas que estaba tomando en ese momento era de las tres copas alineadas; pero en la original realmente podías distinguir las tres copas. Y eso no era suficiente para mi, y cuando vi la toma en el LCD de la cámara, noté un patrón interesante en el tallo de la copa de vino del frente, y la enfoqué en mi siguiente toma. Usé la característica Super Macro de mi S2, y tomé el patrón en el tallo de la copa de vino frontal, manteniendo algunas partes de la copa también. Esa foto terminó primera en su categoría entre nuestros trabajos finales.

...y no sorprende que haya terminado primera. Cambiando de tema ahora, Cymer, ¿qué me dices de los desnudos (o semi-desnudos en tu caso)? Siempre me he preguntado si no se sentirá el o la modelo incómodo durante esas sesiones fotográficas. ¿Cómo manejas esas situaciones?

Te diré que no solamente el modelo. ¡También me incomodo yo durante esas sesiones porque estoy constantemente consciente de que mi modelo está en juego con lo que estamos haciendo! Además, a pesar de que tiendo a poner cierto nivel de sensualidad en mis fotos, trato de mantenerlas artísticas y con clase. Eso requiere mucha concentración, enfoque y constante control también.

Para las fotografías de la mujer, en realidad fue la maquilladora quien convenció a la modelo. El único trato fue que yo debía estar fuera de la habitación mientras preparaban la foto. Yo entraría solamente cuando todos los pétalos estuvieran en su lugar. Para la foto del hombre, no estaba desnudo en realidad. ¡Estaba usando pantalón debajo de esa tela!

Creo que no solamente necesitas obtener la confianza de tu modelo durante las fotos sino, más aún, antes de ellas. Tienes que hacerles entender qué es lo que quieres hacer y tienes también que marcar los límites con tu modelo. Desde luego, debes también respetar esos límites —es la única forma en la que tu modelo se sienta cómodo con la foto, aun si está mostrando partes de su cuerpo que normalmente no mostraría.

Y es algo para tener en cuenta porque la mayoría no lo ve así... hablemos del resto de tus fotografías y de la fotografía como un todo: ¿Dirías que vale la pena ser fotógrafo en el siglo 21? ¿Cómo dirías que la fotografía ha cambiado tu vida?

Si vale la pena o no, diría que depende de tus metas. Para mí, por ejemplo, no es una cuestión de hacer dinero. Es un escape creativo más que cualquier otra cosa. Y, como tal, deseo mantenerlo como un hobby y mantenerme fuera de las presiones del profesionalismo tanto como pueda. Y ya que es un escape creativo, diría que es realmente satisfactorio. Soy suficientemente afortunado como para ser de la confianza de maquilladores profesionales, y modelos, quienes me dan los medios para hacer lo que estoy haciendo. ¡Tampoco cae mal tener amigos tan engreídos que están deseosos de posar para mí! ¡ja, ja, ja!

Bueno, sobre eso, el apoyo de mi familia y amigos es importantísimo para mí. Y es de donde mucha de mi satisfacción viene. Hacer que mis amigos se sientan hermosas o guapos con sus fotos y verles contentos por lo que estoy haciendo. Así que, no he ganado millones por la fotografía, esa satisfacción es más que suficiente para estar alegre y orgulloso de lo que hago. Y creo que es lo que más debería importar, además.

Sí, ¡ésas son las palabras de un artista! Ahora la última pregunta, Paul... perdón, Cymer. ¿Sobre qué serán tus siguientes fotografías? ¿Tienes algo en mente?

A decir verdad, compré unos lentes macro de auto-regalo de cumpleaños en mayo y no he tenido oportunidad de usarlos. Realmente quisiera fotografiar mucha más naturaleza y vida salvaje, y no ayuda mucho vivir en el corazón de Manila metropolitana. Aunque tengo muchas mascotas —peces, aves, tortugas e iguanas— así que quizás las use de objetivos por ahora. Aún sueño con fotografiar los ojos de una libélula. También quiero fotografiar arañas.

Sobre los retratos, estoy realmente intentando llenar los vacíos de mi "portafolio". Es por eso que estoy tomando fotografías de varones ahora. He hecho muchas tomas de mujeres, por lo que, en comparación, mis habilidades retratando varones se estaban quedando atrás. Probablemente veas más fotos de varones de cuerpo entero y de mujeres también. Me he enfocado en mostrar belleza, así que creo que es tiempo de cambiar y mezclar un poco. Quizás no demasiado pronto. Quiero tomar un descanso para reorganizar mis ideas un poco más y así tener más conceptos e ideas.

Estaré a la espera de ver tus próximas fotografías entonces. Gracias por la entrevista y ahora es tiempo de dejar que los lectores de Heptagrama admiren tu fotografía. Chao, Cymer.

Bien, ¡espero que la encuentren suficientemente buena para ser admirada! Chao, Jorge.

Fotografías de Paul "Cymer" Rocimer

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